Rejuvenece tu rostro sin perder tu expresión natural
El paso del tiempo, el estrés y los gestos repetitivos pueden marcar tu piel con líneas de expresión. Si deseas atenuarlas y prevenir su aparición sin perder naturalidad, los neuromoduladores son una excelente opción.
En el Instituto Dermatológico García-Legaz, te ayudamos a reducir la actividad muscular en áreas específicas de tu rostro, devolviéndote una apariencia más relajada y descansada sin necesidad de procedimientos invasivos.
Ciencia y belleza en equilibrio
Los neuromoduladores actúan inhibiendo la liberación de acetilcolina, un neurotransmisor esencial en la contracción muscular. Su aplicación mediante microinyecciones permite reducir temporalmente la actividad de ciertos músculos faciales, logrando una relajación controlada.
En García-Legaz, queremos destacar que este procedimiento no paraliza el músculo por completo, sino que disminuye su actividad lo suficiente para conseguir una apariencia más descansada y rejuvenecida al suavizar las arrugas dinámicas, todo ello sin comprometer la expresividad natural de tu rostro.
Arrugas faciales y más
Los neuromoduladores son una excelente opción para reducir arrugas en el tercio superior y otras áreas específicas de tu rostro. Sus aplicaciones más habituales incluyen:
Más allá de su uso estético, los neuromoduladores tienen aplicaciones terapéuticas, como tratar la hiperhidrosis para controlar la sudoración excesiva, aliviar el bruxismo relajando los músculos mandibulares y reducir migrañas y dolores crónicos al minimizar las molestias musculares causadas por contracciones involuntarias.
En manos expertas
Cada rostro es único y requiere un análisis detallado para determinar las zonas óptimas de aplicación de los neuromoduladores. Durante la evaluación previa, se identifican los puntos estratégicos que garantizarán un resultado armonioso.
La marcación de estos puntos permite adaptar el tratamiento según tu expresión facial, equilibrando la suavización de arrugas con la movilidad necesaria para una apariencia fresca y natural.
Por ello, es fundamental confiar en especialistas en neuromoduladores como los del Instituto Dermatológico García-Legaz, donde garantizamos una aplicación precisa y en las dosis adecuadas para preservar la naturalidad de tu rostro y evitar cualquier rigidez.
Preguntas frecuentes
¿Te quedan dudas?
Te las resolvemos
Los efectos de los neuromoduladores comienzan a ser visibles en pocos días y alcanzan su máximo resultado aproximadamente dos semanas después de su aplicación. Su duración varía entre 3 a 6 meses, según el tipo de producto, la dosis aplicada, el área tratada y tu respuesta individual.
Con el tiempo, el organismo descompone gradualmente la sustancia, permitiendo que la actividad muscular vuelva a la normalidad. Por ello, para mantener los resultados, es recomendable repetir el tratamiento periódicamente, siguiendo las indicaciones de tu especialista.
La mayoría de los pacientes experimentan sólo una leve molestia durante su aplicación.
Al tratarse de un procedimiento con microinyecciones, es posible sentir una ligera incomodidad o notar mínimos puntos de sangrado en la zona tratada, los cuales desaparecen rápidamente. Aunque no suele ser necesario, para mayor confort, se puede aplicar anestesia tópica antes del tratamiento.
Sí, los neuromoduladores son seguros cuando son administrados por profesionales cualificados y en las dosis adecuadas.
Los efectos secundarios, cuando aparecen, suelen ser leves y temporales, como enrojecimiento, hinchazón o pequeños hematomas en la zona tratada.
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